TRABAJO

Pues que ante la triste situación económica que atraviesa la Republica Independiente de nuestra casa, no se me ha ocurrido otra cosa, que disfrutar de la agradable sensación de tener dos trabajos.

Tener un trabajo, poco remunerado, por otro poco remunerado, hacen dos trabajos, algo remunerados.

Sin embargo, si esto lo aplicas al nivel de estrés, curiosamente, la multiplicación en vez de ser por dos, es por diez.

Levantarse a las ocho menos cuarto, empezar a trabajar a de nueve a dos, comer, hora y media, a las tres y media, comenzar de nuevo, hasta las seis y media, hasta aquí, cinco puntos de estrés.

Salir a las seis y media, comenzar en el otro lado, una visita, otra, llamadas de teléfono, otra visita, otra llamada, no hay sitio para aparcar, y hay que dejar el coche a dos manzanas de donde vas, siempre,!siempre¡, va a pasar eso, es una ley no escrita, corre para abajo, corre para arriba, llamadas, visitas, ¡las nueve y media!, se acabo, no puedo mas, ya esta, hasta aquí hemos llegado.

Ala vuelve a casa, ¡el sofá!, ¡Sí!, pero no...., hay que esperar un poquito, hay que ayudar un poquito en casa, la casa no puede recaer solo en uno, eso es algo que se aprende a fuerza de golpes, a fuerza de equivocaciones, ¡hay que ayudar!, es una regla no escrita con la cual deberíamos nacer todos sabida, las mujeres lo saben, a nosotros nos cuesta algo más.

Las diez y media, la cena, el sofá.....¡el sofá!, después de la cena si, después de la cena, el sofá es mío, un ratito, porque la cama espera, pero es mío.

¿Hasta cuando merecerá la pena, no disfrutar de la casa, de la familia, por dos trabajos, poco remunerados? No lo sé, espero, que hasta dentro de poco.

1 comentarios:

Anónimo dijo...

Buff como te entiendo!!!!... la vida es pa vivirla... esa es una de mis premisas, pero a veces es tan dificil...
Devuelvo la visita :)